lunes, 10 de enero de 2011

SP HERRERA 1 - CD TALARRUBIAS 2

¡¡Sin ideas!!
<>align="justify">Adios a la imbatibilidad como locales en el municipal de Herrera del Duque, adios al liderato y bienvenidos a la tierra y a la cruda realidad. Mal partido el de ayer, malísimo en todas las líneas, y es que, no funcionó ninguna. Permisibilidad defensiva total en el primer gol, fallo en el marcaje al segundo palo en el segundo, falta de precisión en pases en el centro del campo, y poco (o ninguno) mordiente en bandas y en la línea delantera. Si a ello sumamos el gran partido que se marcó Talarrubias y su portero, centrado principalmente en llevar a cabo un buen planteamiento defensivo cuyo objetivo principal era el de parar a Risquillo, y unas rápidas salidas a la contra, el resultado es el obtenido.

Aún así, y sin intentar justificar nada, vi una buena actitud (eso si, sin fluidez ninguna en el juego y con más corazón que cabeza) más en la segunda mitad, donde el equipo cercó el área rival durante gran parte del tiempo y que, de no ser por la buena actuación de Pedro Luís ante un disparo de Pirro en inmejorable posición, ya al final, habríamos salvado al menos un punto.

Alineación:

Juan, Efrén, Pedro, Pirro, Ricardo, Miguel, Risquillo, Rubencito, Javi Roncero, Raúl y Álvaro.

Suplentes:

Javi Prieto, Juanma, Francis, Pacheco y Juan Carlos.

Cambios:

Pacheco x Rubencito (Min. 55)
Juan Carlos x Javi Roncero (Min. 65)
Francis x Álvaro (Min. 80)

Goles:
0-1 Manuel (Min. 25)
0-2 Luis (Min. 47)
1-2 Risquillo (Min. 85)

Tromba de agua la que recibía a los dos equipos ayer en Herrera del Duque , y que curiosamente cesó para el inicio del encuentro, dejando la tarde con unas rachas de aire frío y lluvias intermitentes, que apelotonaba a los aficionados bajo techado, sin que apenas se moviera nadie de aquellas inmediaciones. El terreno de juego se encontraba rápido por lo tanto, y suponíamos que Talarrubias tardase en adaptarse, pero ayer fue todo al revés, pues parecía que los visitantes fuesemos nosotros.

La primera mitada, no fue nada buena, ni para unos ni para otros, y quizás, solo cabe destacar la buena disposición defensiva y orden de los de Talarrubias y un juego sin sentido por parte local que no conducía a nada.

Empezamos intentándolo con Risquillo por banda, donde este, consiguió en dos o tres ocasiones desbordar al buen lateral izquierdo visitante, pero ayer no hubo la frescura de otras veces, en las que llegamos con dos-tres efectivos al área para coger esos centros, y solo presentábamos (muy tímidamente) a Javi, que ante toda la defensa poco podía hacer.

Talarrubias tampoco mostró mucho en ataque, solo comentar la pelea de su número 7 Manuel, un par de tiros a portería desde la frontal y dos saques de falta directa que se marcharon por arriba, pero que, verdaderamente, no entrañaron peligro para la meta de Juan.

Hasta que mediada la primera mitad, en un saque de falta ensayada, vino el primer gol visitante, donde Manuel, libre de marca, empalma el balón que le caía blandito tras ser picado en el saque haciendo que Talarrubias cobrase ventaja en el marcador.

Después del gol todos esperábamos una reacción inmediata y tajante por parte de la SP, pero esta nunca llegó, al menos transformada en buen juego. Solo pudo llegar a balón parado, y así, a la salida de sendos corners, Miguel estuvo a punto de empatar en dos ocasiones. La primera en un buen remate a la media vuelta, que Pedro Luís saca in extremis muy pegado al palo, y la segunda, esta vez de cabeza, vuelve a sacar Pedro, quizás con más suerte que buen hacer, pues el balón le golpea a él. Tras el rechace, y en muy buena posición, Javi envía a las nubes el balón.

Terminada la primera mitad sin más historia, se intentan aunar criterios en el descanso y levantar los ánimos a los nuestros, pero a diferencia de la semana pasada en Rena, donde conseguimos el empate muy prontito, fue Talarrubias quien hincó el diente de nuevo.

Tras un error en cadena, que empieza tras una entrega de balón al contrario, el equipo se queda colgado cuando subía. El interior izquierdo blanquinegro, y tras gran galopada, pone un perfecto pase medido a Luís, que libre de marca, coloca el balón en el palo largo de Juan sin dejarlo caer, transformándolo en el segundo gol. Tanto de bella factura que ponía las cosas muy cuesta arriba.

Rápidamente, si hicieron un par de cambios tácticos que dejaban a la SP con tres defensores. Indudáblemente, esto se notó, y el balón estuvo gran parte del tiempo en las inmediaciones del área visitante, aunque también dejaba a nuestra defensa a merced de las rápidas contras que montaba Talarrubias que les hacían emplearse a fondo.

Ansiedad en grado máximo, donde se buscaba la victoria antes que intentar remontar hasta el empate, que no facilitaba las cosas, transformada en pases de 50 o 60 metros, imprecisos y fáciles de despejar. A nadie se le ocurrió circular el balón por el centro y de ahí a las bandas, donde Risquillo lo intentaba una y otra vez, consiguiendo irse con éxito en alguna ocasión a duras penas, pero sin esa superioridad que otras veces le permite dar ese último pase o entrar con el balón hasta la cocina.

Demasiado individualismo otras veces, cuando se pretendía entrar entre una maraña de hasta cinco jugadores en vez de ceder a compañeros habilitados para el remate.

Pundonor de Juan Carlos, que se llevaba todo por arriba, pero sin conseguir dirigir el esférico entre los tres palos, y si lo hacía, eran balones facilitos para Pedro.

Todo esto hasta llegar a los minutos finales, donde conseguimos recortar diferencias merced a un error en el despeje de la defensa visitante, que recoge Risquillo, batiendo cruzado y por bajo a Pedro Luís.

Aún quedaban 5 minutos más el alargue, que resultaron ser otros 5, debidos a la cantidad de parones en los minutos finales por lesiones de unos y de otros, cambios etc ... donde seguimos intentando encontrar el empate que nunca llegaría, gracias a la soberbia intervención del 1 de Talarrubias, que sacó un remate de Pirro a bote pronto que todos presuponíamos gol, pues remató solo y casi a quemarropa como suele decirse.

Gran alegría de los de Talarrubias, que seguro les dará moral para lo que queda de temporada, y que jugando con ese orden y manteniendo esa férrea defensa, pueden encontrarse en posiciones mucho más adelantadas en breve. Enhorabuena.

En resumidas cuentas, partido que ha de servirnos para corregir esos fallos de los que he hablado y por supuesto no caer en el pesimismo, ni en vaticinar catástrofes infundadas en un mal resultado de un partido, donde se dieron condicionantes que, seguro, difícilmente volverán a repetirse a lo largo de la temporada.

Ánimo a todos y recordad, se pierde una batalla, pero seguro que no vamos a perder la guerra por esto.
Nos vemos.

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